Liposucción: el gran mito

Todo lo que necesitas saber sobre el gran mito que rodea al tema de la liposucción

Me he decidido a escribir sobre este tema a raíz de una consulta reciente con una paciente que acudió para una liposucción. Era un buen caso , o al menos, operable.  Después de la pertinente entrevista, valoración, entrega de documentación, etc, se habló de fechas de quirófano, y es cuando la paciente me dice: “Doctora, ¡ qué alegría!, me habían dicho que rechazaba gran cantidad de  liposucciones.”.

No es verdad. Lo que ocurre es que no hay muchas pacientes candidatas a intervenirse de una liposucción, o mejor dicho, sí las hay, pero no vienen a consulta. En la playa veo muchísimas  a las que me encantaría operar, pero muchas de las pacientes que acuden a consulta no son buenos casos.

Los motivos son varios:

1.-Una paciente con sobrepeso no debe operarase. La liposucción no se hace para adelgazar, sino para eliminar acúmulos localizados de grasa en áreas donde ni la dieta ni el ejercicio físico logran eliminar en personas con un peso adecuado y estable. Si constantemente se producen aumentos y disminuciones de peso, la piel no se retraerá de forma adecuada en el postoperatorio y el resultado será pobre.

Entonces me preguntarán si sólo es posible realizar una liposucción en gente delgada, y en ese caso, ¿para qué se la va a hacer?. Pues en cierto modo sí, gente delgada, o con un peso moderado, pero con localizaciones grasas exageradas en alguna zona de su cuerpo. Si se pretende perder grasa de “todo el cuerpo”, y disminuir 2-3 tallas, deberá adelgazar, no hacerse una liposucción.

Hay colegas que practican megaliposucciones con este objetivo, eliminar muchos litros de grasa en un solo tiempo quirúrgico. Nunca lo he hecho ni lo haré. Son cirugías con una morbi-mortalidad enorme, donde se somete al riñón, corazón y pulmón a un trasiego de líquidos muy importante con sobrecarga y disbalance de los mismos, así como al esfuerzo de metabolizar grandes cantidades  de  anestésicos locales y adrenalina que, a veces, provocan desenlaces fatales.

Por tanto, no seré yo quien corra  ese riesgo, ánimo al que lo hace y enhorabuena al que lo logra, No digo que esté prohibido, sino que yo no asumo ese riesgo.  Con el paso de los años se adquiere experiencia y también prudencia. Toda cirugía implica un riesgo, mínimo, pero riesgo,

¿ Para qué asumir más del necesario cuando hay alternativas más seguras para un paciente sano, como son nuestros pacientes?. Se envía al especialista correspondiente a perder peso y luego se reconstruye lo que se precise.

2.- Otro aspecto que “ no se opera”,  es la celulitis.

La celulitis no se trata con cirugía. No se trata prácticamente con nada, y si se tiene tendencia a tener celulitis, desgraciadamente se tendrá toda la vida. Siento daros esa mala noticia.

Entendemos por celulitis o “piel de naranja” un trastorno de la hipodermis donde están implicados factores hormonales, metabólicos, genéticos y microcirculatorios así como el estilo de vida (alimentación, sedentarismo, tabaco, etc).

Esta capa de grasa superficial afectada por todos estos factores no es la que se opera en una liposucción,  en ésta se extraen acúmulos más profundos que deforman la figura .

Los masajes de cualquier tipo, manuales o con aparatajes  más sofisticados, mejoran el drenaje linfático y la apariencia de esta piel, así como una dieta equilibrada, una buena hidratación, practicar deporte de forma regular, no fumar para oxigenar más los tejidos, etc. Pero en el momento en que se abandonan estas prácticas, la piel vuelve a su estado celulítico inicial.

3.-Pacientes con una flacidez cutánea excesiva: otro aspecto que empeora notablemente el resultado. Y que además suele existir en casi todas las pacientes de una cierta edad porque es directamente proporcional al paso de los años. Pues bien, esto tampoco se opera. Se puede eliminar esa piel con una abdominoplastia, un lifting de piernas o de brazos….pero si dejamos esa piel ( con estrías, envejecida o “dada de sí”) que es lo que se hace en una liposucción , nunca se retraerá y el resultado será malo.  Otra cosa es combinar la eliminación de grasa con una resección cutanéa ( liposucción + abdominoplastia o lifting de brazos o muslos), esto sí da buenos resultados, pero por sí sóla, la liposucción no corrige el problema, es más, puede agravarlo y provocar una piel más descolgada y flácida que al principio.

De ahí que las pacientes jóvenes sean las mejores candidatas.

4.- Por supuesto, pacientes con antecedentes cardíacos, renales, tromboembolias previas, tromboflebitis, etc, serán descartadas en la primera visita. Es muy típico que se considere esta  cirugía como algo banal porque no existen cicatrices externas ( mínimas), pero como he dicho es una cirugía en toda regla, y además, con una tasa de complicaciones alta si está mal indicada, incluso mortales.

También existen diferentes “acepciones” que confunden a las pacientes.

Liposucción
Foto sacada de un libro sobre liposucción

LIPOESCULTURA versus LIPOSUCCIÓN

Es una liposucción y algo más. Se trata de modelar el cuerpo, no sólo con la extracción de la grasa acumulada, sino que en vez de desechar esa grasa se usa para rellenar deformidades donde se ha perdido volumen. Con el envejecimiento se acumula grasa en algunas zonas, pero también se pierde en otras dando  un aspecto envejecido, como por ejemplo a nivel facial; si comparamos la cara de un niño y la de un anciano se aprecian  claramente las “redondeces” de los niños frente a ese aspecto hundido en los ojos o  mejillas de gente de edad avanzada.  Y a nivel corporal  sucede lo mismo: las curvas de la juventud se van perdiendo y aparecen caderas mucho más masculinas y desdibujadas. Así que aspiramos grasa donde sobra, la tratamos  y la infiltramos en otro sitio donde hace falta. Ahora bien, esta grasa infiltrada se va a reabsorber siempre en una proporción variable e impredecible, por lo que son frecuentes las asimetrías y la necesidad de nuevas cirugías para conservar el volumen inicial deseado. Muchas pacientes no están dispuestas a operarse en más de una ocasión, por lo que deben conocer de antemano todo el proceso al que van a someterse porque igual no lo aceptan.

VIBROLÁSER, LIPOLÁSER, CRIOLIPOLISIS,  LIPOSUCCIÓN TRADICIONAL….

Con estos términos hablamos técnicamente de cómo extraer la grasa. Existen muchos dispositivos en el mercado para realizar una liposucción, para complicar más la cuestión. Cada uno tiene su indicación y cada cirujano elige aquel que le hace sentirse más  cómodo.  Bien usados, todos dan buenos resultados, pero mal indicados pueden producir catástrofes: seromas, quemaduras, retracciones de piel intratables, etc. Podríamos dedicarle otro capítulo entero a este tema. Pero sólo una pequeña reseña: me llama mucho la atención que el paciente acuda pidiendo   un tipo determinado de liposucción con una desinformación total de lo que pide. Imagino que la publicidad hace su cometido. Nosotros debemos revertir muchas veces esas promesas mágicas y explicarles bien a las pacientes en términos sencillos  en qué consiste cada proceso.

Por todo esto, es por lo que se rechazan  muchas liposucciones, no es mi capricho; Es un mero resumen de un tema muy amplio. En consulta te resolveré todas tus dudas sin ningún compromiso.