¿Qué son los retoques?

¿Significa que estoy mal operada o que he hecho algo mal? No.

¿Por qué mi amiga se ha hecho la misma cirugía que yo y no necesita ningún retoque?

Es una pregunta muy recurrente entre los pacientes.

Y entre los cirujanos también. ¿Por qué un caso que parecía fantástico “a priori” no consigue al final tan buen resultado?.

Partiendo de la base de que tanto cirujano como paciente deben seguir escrupulosamente los protocolos del buen hacer en quirófano y en el postoperatorio, hay factores que no podemos controlar ni paciente ni cirujano, sino que dependen exclusivamente de la genética del paciente, por ejemplo, la cicatrización, y no hay nada que pueda modificar el curso de la misma. Una cosa es la curación de la herida que ocurre las primeras semanas del postoperatorio, y otra bien distinta la maduración de la misma, que dura un año mínimo. Durante este tiempo la cicatriz puede disimularse mucho o todo lo contrario, hacerse ancha, sobreelevada, roja…

Os muestro dos zonas de una cicatriz en la misma paciente, una zona muy buena, y en la otra ha hecho una cicatriz hipertrófica. Hecha por mí ambas, el mismo día y con la misma técnica quirúrgica.

Una vez llegamos al final de este proceso, y dependiendo del aspecto final de esa cicatriz, podremos mejorarla o no, con un retoque. Y no significa que la paciente haya hecho nada mal, ni tampoco el cirujano.

Existen muchas causas de retoques, tantas como tipos de cirugía. La adaptación-retracción de la piel en una liposucción tampoco la podemos controlar, y a veces es necesario un pequeño retoque para regularizar el aspecto de la zona operada.

La colocación final de los implantes mamarios también se puede ver modificada por la formación de una cápsula a su alrededor más o menos fibrosa que los desplace de su situación original y origine asimetrías que requieran “un retoque”. ¿Y por qué me ocurre sólo en un lado si el otro tiene hecha la misma técnica quirúrgica y está bien?. Pues porque la cicatrización no depende de ninguna de las dos partes, paciente y cirujano, y es así de caprichosa, no encontrando respuesta a estas preguntas.

¿Entonces me puede volver a pasar? Sí, aunque es poco probable, es una cuestión de probabilidades, los cirujanos no tenemos la certeza absoluta de lo que va a ocurrir, si bien lo habitual es que no ocurra nada de esto, y, por lo tanto, una segunda vez es menos probable aún. De hecho, si supiéramos que algún paciente va a tener algún tipo de problema, obviamente no lo operaremos, porque ese problema lo vamos a tener que resolver nosotros. ¿Y a quién le gusta tener problemas?. Como contrapartida os diré que estos pequeños ajustes se suelen resolver con una cirugía menor, de forma ambulatoria, os permiten trabajar y no suelen ser dolorosos.